Liz Martínez, abogada de los oficiales Derlis Sanabria Juan Amarilla asegura tener forma de demostrar la inocencia de sus defendidos.

“Sostengo que fue un accidente, por eso hablo del bache donde se empezó a disparar solo, porque tiene tiros continuos”, comentó Martínez en conversación con la 1080 AM.

Detalló que el primer proyectil alcanzó al capot, pero los siguientes ya no se pudieron controlar por dos motivos: el bache por el que pasó la patrullera y la dirección que tomaba el padre del niño circulaba en zig zag.

Por otro lado desmintió que los uniformados hayan incurrido en omisión de auxilio, pues una vez que se detuvieron llamaron a los bomberos y una ambulancia para pedir asistencia para la víctima, algo que quedó registrado y se puede comprobar.

La abogada detalló que un vehículo con las mismas características era buscado por haber sido utilizado para perpetrar un asalto, dato que los policías no mencionaron desde el principio, pero que según ella, justifica la persecución.

Martínez cuestionó la actitud del padre y su argumento de que esperaba llegar a un lugar más iluminado para detenerse, ya que en todo el trayecto había varias estaciones de servicio con suficiente claridad.